* BOLONIA: UNA VUELTA DE TUERCA MÁS.

BOLONIA: UNA VUELTA DE TUERCA MÁS.


Durante estos últimos meses se ha hablado mucho sobre el proceso de Bolonia, y sobre todo lo que este conlleva: aumento de tasas y la elitización de la universidad; y la desaparición de algunas carreras y la orientación hacia una especialización de cara al mercado laboral.

Esto, que ya es grave, es tan solo la punta del iceberg, es solo una cuestión de forma, el trasfondo de este proceso afecta a como se va a construir el conocimiento a partir del 2010, fecha limite para que comience a funcionar esta nueva maquinaria educativa, y que afecta a todos los niveles educativos y en especial la educación secundaria y la educación universitaria.

La cuestión más preocupante es la concepción de conocimiento que se quiere implantar, ésta es la de un conocimiento exclusivamente de cara al mercado de trabajo, se trata en definitiva de convertir a l@s alumn@s en clientes del sistema educativo que enfoquen la educación en términos de rentabilidad económica, es decir hacer una inversión de cara a obtener beneficios económicos, en definitiva a reproducir y perpetuar la lógica capitalista.

El modelo que se esta implantando es el de alumn@ como espectador, es decir como mero receptáculo de un conocimiento, previamente determinado según las demandas del mercado de trabajo. En este modelo la transmisión de conocimiento es vertical, de ahí, y esto no es casual, que se trate (como ocurre en nuestra facultad con la circular de los carteles aprobada por la junta de facultad en noviembre de 2007) de dinamitar toda comunicación horizontal entre los estudiantes.

Además este nuevo modelo, no permite en su seno la existencia del pensamiento y de los espacios críticos, no sólo porque este no sea rentable, sino porque la mera posibilidad de que se desarrolle cualquier tipo de alternativa al capitalismo (y a su modelo educativo) asusta a unas elites que saben que todo el proceso de acumulación capitalista va en contra de la mayoría, y más ahora cuando se avecinan tiempos de crisis.

Por lo tanto, somos la comunidad universitaria quienes tenemos la responsabilidad de frenar este proceso, de no claudicar aunque el proceso ya se haya puesto en marcha y de denunciar que se esta haciendo sin debate público alguno, en definitiva parar que la educación trate de convertir a l@s estudiantes en engranajes acríticos de un sistema que sólo beneficia a un@s poc@s, en detrimento de una mayoría.


NI LOU, NI BOLONIA, NI PRECARIEDAD, FUERA EMPRESAS DE LA UNIVERSIDAD!