Cerca de 30 estudiantes de diferentes titulaciones llevan encerrados pacíficamente desde ayer noche en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Burgos, en un acto de protesta contra el Espacio Europeo de Enseñanza Superior (EEES).
En consonancia con el resto de universidades del Estado español, han decidido ocupar uno de los edificios universitarios para denunciar el acuerdo de Bolonia, exigir la paralización del proceso educativo y que se lleve a cabo un referéndum entre los estudiantes. Se pretende así conseguir una reforma educativa verdaderamente democrática en la que no solo se tenga en cuenta las propuestas de los gobernantes, sino también la del sector estudiantil.
Además, los encerrados quieren denunciar con el acto las detenciones llevadas a cabo en Valencia y los expedientes abiertos a estudiantes barceloneses durante las protestas contra el plan estudiantil.
Los manifestantes efectuarán durante su encierro actos culturales y de formación, para informar a todo aquel que se quiera acercar sobre el proceso educativo. Durante la noche de ayer han debatido internamente sobre las líneas de acción.
El encierro no tiene una fecha de finalización establecida por el momento, ya que se prevé que para el día de mañana el número de estudiantes que pasarán la noche en la Facultad aumente.
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